OPINANDO, QUE ES GERUNDINO


MAPA EMOCIONAL


Solemos recordar más lo positivo que lo negativo de nuestras experiencias (la memoria es muy selectiva en ese aspecto).

¿Porqué no tomar notas de esas emociones?, Tomar nota de esas experiencias debe ser algo prioritario para poder echar mano de vez en cuando de una reserva de recuerdos bonitos.

De niños nos emocionan muchas cosas, todo es nuevo y lo vivimos con grandes dosis de excitación, curiosidad y buenas espectativas.

Ya de adultos, después de muchos años, al volver a visitar esos mágicos lugares a los que fuimos de pequeños nos sobreviene una especie de frustración. Las cosas muchas veces apenas cambian en realidad, lo hacemos nosotros, pero decepciona que todo fuese tan pequeño y apagado. Las distancias se vuelven muy cortas en comparación a cómo las recordabamos; los objetos más insípidos antes nos resultaban casi totémicos.


Después de tanto tiempo, la geografía de nuestra infancia nos parecía, en efecto, infantil.

A veces es mejor no volver a visitar los lugares que hemos idealizado en la infancia o no volver a ver aquella película que tan buen recuerdo nos dejó. Entonces entran en juego los recuerdos, que gracias a nuestro mapa marcado emocionalmente, a ese diario de recuerdos, todo se conservará virgen, intocado, señalizado y marcado para siempre con los detalles que nos abrumaron en su día.


En cualquier caso, todas ellas serán supervitaminadas, superlativas, incorruptibles al paso del tiempo, mejores que cualquier objeto o posesión, porque los recuerdos acostumbran a mejorar el pasado.



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